El miércoles que viene hay convocada una huelga general. Es una medida excepcional de los trabajadores para protestar, pero... ¿protestar por qué? ¿Para conseguir qué? Los sindicatos no han podido, o no han sabido dejar claro qué se intenta conseguir en esta huelga general: ¿frenar la crisis? ¿reducir el paro? ¿decir que los bancos ganan demasiado dinero?
Se trataría en este caso de objetivos abstractos, que son quizá más propios de un debate entre partidos políticos que de una protesta de trabajadores por sus derechos. A lo mejor es por eso por lo que la huelga no acaba convertirse en masiva, en un país con 4 millones de parados y una situación económica, ahora sí, mucho peor que la todos los demás países desarrollados.Un enfoque más preciso hubiera quizá sido más efectivo para los convocantes:
Contra la reducción de la indemnización por despido -financiada aún más con el dinero público- y la ampliación de las causas de despido procedente hasta casi el infinito.
Contra la congelación de las pensiones.
Contra las ayudas a la banca.
Contra la subida del IVA.
No estoy diciendo que estas causas sean suficientes para ir a la huelga general, pero al menos son más concretas. No sé qué opináis, yo personalmente creo que el gobierno ha fracasado en la gestión de la crisis, pese a que en gran parte estuviese cocinada por la burbuja inmobiliaria que crearon anteriores gobiernos. Se han hecho tantas cosas mal durante tanto tiempo que supongo que hay quien piensa que es ya demasiado tarde e inútil hacer una huelga general ahora...
No hay comentarios:
Publicar un comentario