lunes, enero 19, 2009

A vueltas con el estímulo fiscal en EE.UU. ¿debate técnico o ideológico?


En EE.UU. existe un debate transcendental entre economistas de primera línea sobre cómo salir de la crisis. En una esquina, los keynesianos liderados por Paul Krugman, a favor de reactivar la economía a través del gasto público. En otra esquina, un grupo de escépticos entre los que se encuentra Greg Mankiw (aunque precisamente su postura no está claramente en contra del estímulo fiscal, simplemente es "escéptico").
En el fondo, si eres escéptico ante el aumento del gasto público es que crees que para salir de la crisis habría que bajar los impuestos (porque a un tipo de interés cero como el que hay en EE.UU la política monetaria está casi agotada) y en lo que todos coinciden es que algo hay que hacer.
Escondida tras argumentos aparentemente "técnicos" (como si el multiplicador del gasto público es mayor o menor que el multiplicador de las bajadas de impuestos) está la misma guerra ideológica -los economistas también tienen ideología- de siempre: más gasto público o menos impuestos.

Más Estado o menos Estado.

6 comentarios:

  1. No soy economista, soy un simple aficionado que por razones laborales, o por mera experiencia me intereso por la economía, como usted ya habrá adivinado, por tanto es posible que mis opiniones estén poco o nada fundadas académicamente.
    A ver, si bien es cierto que las crisis económicas son cíclicas y “saludables” para el saneamiento, me temo de la presente es muy diferente a todas las anteriores, sé que es obvio que todas son diferentes, pero ésta lo es de una forma mucho más acusada, en consecuencia creo sinceramente que las recetas de resolución de las anteriores, vengan de teorías de Keynes, o de Mankiw, no servirán para casi nada, serán necesarias ideas de nuevo cuño, y seguramente de nuevos “espadas”, aunque posible que los Sres. Krugman o Mankiw aporten algo, aunque insisto, en que en mi opinión, serán ideas novedosas y sin precedentes históricos, en consecuencia estos debates se me antojan bastante estériles.

    ResponderEliminar
  2. Vaya Xavier, yo estoy de acuerdo contigo, los economistas tendemos a refugiarnos en las teorias de nuestros antepasados, en vez estudiar la nueva situacion economica para intentar nuevas fórmulas de actuación.
    Sin embargo, la economia es una ciencia social, y por tanto muy dificil de predecir, depende del comportamiento humano.

    Los economistas somos buenos a toro pasado, explicando que ha sucedido, eso si que se nos da bien.

    Creo como tu que estos debates se quedan estériles, dentro de unos años, eso sí, podremos decir que se ha hecho bien y que se ha hecho mal, cuales han sido las consecuencias y que se deberia haber hecho, eso si, una vez ya no tenga solucion.
    saludos

    ResponderEliminar
  3. Por favor Sr. José Amorós, creo que en este comentario estas infravalorando las capacidades de esta "ciencia social", excelente definición por cierto, los economistas también sois muy buenos realizando el diagnostico del problema, mejor dicho en el presente momento económico, la infinidad de problemas y desajustes, ¿Y si no tenemos adecuados diagnósticos, como vamos a encontrar soluciones?, en consecuencia los Mankiw, Krugman, Keynes…. fueron, son y seguirán siendo una “especie” que debemos conservar.

    Por cierto amigo Amorós, imagino que sabrás que no hace mucho que el nobel de Robert J. Aumann declaró en Pamplona, creo que en diciembre, que esperaba que esta crisis sea corta ya que la economía es firme y sana.

    Si lleva razón, y no soy quien para contradecir a una persona tal calificada, muchos nos convertiremos en asiduos estudiosos y lectores de que tenga a bien publicar, que Dios le escuche, y nos quite de un plumazo a los presuntos delincuentes (remarco “presuntos” ya que estamos en estados de derecho, afortunadamente) tipo Madoff, gestores de Lehman, una maraña de gestores empresariales, y/o fabricantes de productos financieros incomibles y de nombres rimbombantes, que tienen presuntamente, insisto nuevamente, más de ladrones que de empresarios, o que al menos no aparezcan más "presuntos", que con estos ya tenemos suficiente.

    ResponderEliminar
  4. @Xavier y Jose,
    tenéis ambos razón en que es difícil saber si las medidas propuestas serán útiles en esta crisis, porque cada crisis es distinta a las anteriores y lo único que los economistas saben realmente es interpretar el pasado y ya estamos viendo lo mal que predicen el futuro.
    No obstante, las similitudes con otras grandes crisis (sobre todo la Gran Depresión de los años 30 del siglo pasado) son importantes:
    - Burbuja inmobiliaria y bursátil que explota bruscamente.
    - Reducción drástica del consumo y de la inversión.

    (Podéis leer el libro de Galbraith "El crac del 29" para ver como la especulación de Florida de esa época puede ser la especulación actual de muchas ciudades españolas).

    Ante esto, básicamente existen dos posibilidades en manos del gobierno:
    - La política monetaria.
    - La política fiscal.
    Realmente en que esas son las herramientas para salir de la crisis no hay debate (¿se os ocurre alguna otra?), pero sí que lo hay en cómo aplicarlas. Yo personalmente opino que el BCE ha sido lento bajando los tipos de interés, y que debería bajarlos aún más. También soy más partidario de que aumente el gasto público que de las bajadas de impuestos. En todo caso, si vería bien bajadas de impuestos a las rentas bajas y muy bajas (que son quienes realmente sufren la crisis).
    La alternativa a usar estas políticas fiscales y monetarias es no hacer nada y esperar que todo siga su curso... es una posibilidad como otra cualquiera, pero yo creo que el coste es muy alto en términos de bienestar para muchas personas.

    Por otro lado, y creo que por ahí es por dónde va Xavier, las causas que nos han llevado a la crisis y a las burbujas especulativas también hay que atajarlas: los Madoff (la punta del iceberg) y compañía. Aunque sinceramente no sé muy bien cómo, porque la especulación desmesurada parece un fenómeno repetitivo a lo largo de la historia del capitalismo.

    ResponderEliminar
  5. Juan, sobre tu penúltimo párrafo el “de no hacer nada y esperar a que toda siga su curso”, cuando mis colaboradores en el trabajo se equivocan siempre digo lo mismo (que quieres que te diga, soy un pesado de narices) “únicamente no se equivoca quien no hace nada”, dios mío que me libren de estos.

    ResponderEliminar
  6. Bueno, eso de que "quien no hace nada, no se equivoca", también puede llevar a que "quien no está haciendo se puede estar equivocando"

    ResponderEliminar